Una gran agresión llamada reforma laboral

Ya tenemos una gran agresión llamada reforma laboral que el propio gobierno anuncia que es solo el principio. Hay que construir una sólida respuesta y una resistencia en la calle. Hay que coordinar todos estos esfuerzos para que sean más efectivos y la izquierda social y las victimas del neoliberalismo deben sentarse y reaccionar. Las personas que sufren los excesos capitalistas, contra los que los imponen y nos mandan al paro, como en Grecia, hemos de hacer un piña. Hay que converger y resistir, para contraatacar, esa es la receta y construir un gran polo social que nos rearme frente a la derecha y sin los pusilánimes o timoratos sin credibilidad. Aquí tod@s juntos frente a los poderosos.