24 de noviembre de 2009

Encuentro Relaciones Unión Europea - América Latina

Crónica del Encuentro Relaciones Unión Europea - América Latina
"Pensamos que otro mundo es posible y trabajamos para hacer realidad ese sueño"
David Arrabalí (Mundo Obrero)

Entre abrazos e intercambios de teléfonos se despidieron los participantes en el Encuentro por la construcción de unas nuevas relaciones entre la Unión Europea y América Latina, organizado por el Grupo Parlamentario de la Izquierda Unitaria Europea, en colaboración con Enlazando Alternativas, La Alianza Social Continental y el Tribunal Permanente de los Pueblos.

Los pasados días 18 y 19 de noviembre, en Bruselas (Bélgica), delegaciones de distintos países, en particular la delegación española, trabajamos, comimos, bebimos, reímos, hablamos, discutimos, reflexionamos y nos escuchamos en este espacio de encuentro y de lucha por la justicia y la libertad.

La delegación estuvo compuesta por Jaime Aja, Jorge García Castaño, Esther López Barceló, Pedro Montes, Macarena Vallejo, José Antonio Rubio, Felicitas Velázquez, Fran Pérez, Wilson Gómez, Javier Portal, Marta Segovia, Julio Hellín, Pedro Jiménez, Rubén Bejarano, Ismael González, Jeffersón Cárdenas, Angels Tomas, David Arrabalí, Esther Gómez y Javier Romero, entre otros participantes. Elvira Hernández y Mireia Rovira nos ayudaron y trabajaron para que todo saliera bien.

Nos acompañaron en todo momento el eurodiputado español Willy Meyer, además del eurodiputado irlandés Joe Higgins, la europarlamentaria portuguesa Ilda Figueiredo, y los europarlamentarios alemanes Gabi Zimmer y Lothar Bisky.

En esos dos días trabajamos intensamente en las distintas sesiones del encuentro, apoyando a los ponentes, etc. Fue una experiencia irrepetible porque pudimos relacionarnos gentes distintas que pensamos que otro mundo es posible y trabajamos para hacer realidad ese sueño.

Allí pudimos saludar en la sesión de apertura al veterano sociólogo marxista, Francois Houtard, presidente del Tribunal Permanente de los Pueblos. La presentación corrió a cargo de Lothar Bisky, presidente del Grupo de la Izquierda Unitaria Europea y de Die Linke. Por último intervino Gonzalo Berrón, de la Alianza Social Continental y Enlazando Alternativas.

En el anfiteatro, escuchamos emocionados los testimonios de las violaciones de los derechos humanos por parte de las multinacionales europeas en sectores estratégicos de la economía latinoamericana. Ariovaldo de Oliveira, del Movimiento de los Sin Tierra (MST) nos contó el caso de la multinacional agroalimentaria Syngenta, que está invadiendo Brasil de transgénicos ocupando grandes extensiones de los territorios de la amazonía y espacios naturales, enviando pistoleros y milicias armadas contra los que se oponen a su destrucción.

La compañera Dolores Jarquin, de Nicaragua, nos hablo de las privatizaciones salvajes patrocinadas por las transnacionales en centroamérica, como la empresa española Unión Fenosa que se apropió del sector eléctrico nicaragüense a través de un acuerdo firmado con el anterior gobierno en detrimento de la población y de la legalidad institucional.

Así Mario Palacios, de la Confederación Nacional de Comunidades del Perú Afectadas por la Minería (CONACAMI) del Perú, denunció el saqueo que las multinacionales mineras están realizando usurpando las tierras de las comunidades indígenas, secuestrando, torturando y asesinando a los dirigentes comuneros.

También la transnacional alemana Thyssen-Krupp fue denunciada por crímenes ambientales y violación de derechos de los trabajadores, por los representantes de los pescadores que viven en los alrededores de la Bahía Sepetiba, en el estado de Río de Janeiro, que sufren el impacto de obras realizadas por la Compañía Siderúrgica en el Atlántico.

En las siguientes sesiones se cuestionó el marco jurídico que está permitiendo a las multinacionales actuar con impunidad; y tras esto se habló de hacer propuestas normativas y de acción para corregir las injustas asimetrías que presiden en la actualidad las relaciones entre la Unión Europea y América Latina. En esta última conocí e interrogué a Gianni Tognoni, secretario general del Tribunal Permanente de los Pueblos.

En la sesión de clausura, con la delegación española en pleno, saludamos a nuestro compañero, el europarlamentario español Willy Meyer, así como a la compañera Anna Camposampiero de Rifondazione, Pedro Ramiro del OMAL, Carlos Martínez de ATTAC y Enrique Daza de la ASC. Así como conocimos al compañero colombiano Carlos Alberto Ruiz, con el que ya tenemos algunos proyectos. También pudimos hablar largo y tendido con Fran Pérez, que no sé como consigue estar en todos los lugares al mismo tiempo.

Después del Parlamento Europeo, fuimos al Restaurante Dimensión Latina, en la Rue du Midi, cerca de la fuente del Manneken Pis, donde comimos diferentes especialidades peruanas. Por supuesto, me tomé un pisco y cabrito a lo norteño con los compañeros. En el restaurante se produjeron los primeros cánticos, se cantó La Internacional.

Nos fuimos a la Grande Place, y después de observar la placa que la ciudad de Bruselas le dedicó al camarada Karl Marx, donde redactó el Manifiesto Comunista, nos aventuramos a entrar a un bar cubano que ofrecía música en directo. Y, como no, tomamos algunos rones y mojitos; andaluces, madrileños, catalanes... el propio Willy Meyer y la compañera italiana, cantamos, bailamos y hablamos toda la noche, no lo olvidaré nunca. A estrechar lazos nos ayudó este programa lúdico que terminó en el paraíso de la absenta y luego en el deliriums tremens.

Los participantes nos marchamos y por fin pudimos descansar con una enorme satisfacción, el Encuentro fue un éxito. Pero no fue sólo eso, sentimos que éramos parte de una causa, la defensa de los derechos humanos, la justicia social y la solidaridad entre los pueblos, y que estábamos construyendo algo que va mucho más allá de este y otros encuentros.

Así fue el Encuentro, dos días de abrazos, trabajo, conferencias y algunos mojitos, unidos por un ideal compartido.

12 de noviembre de 2009

Pasionaria, jamas olvidaremos tu ejemplo

XX Aniversario de la muerte de Dolores Ibárruri

Dicen, Dolores, que has muerto. Qué tontería. Pervives en cada uno de los que te quieren y ¡son tantos!
Pasionaria, jamas olvidaremos tu ejemplo
David Arrabalí (Mundo Obrero)

Hace 20 años que murió nuestra presidenta, Dolores, La Pasionaria. Es difícil definir la trayectoria de una mujer de la entidad de Dolores Ibárruri, hija del incipiente movimiento obrero, desde sus comienzos en el foco de la agitación social más importante de aquella época, las cuencas mineras. Esta muchacha pronto se convertiría en la "madre" de todos los comunistas.

Dolores procuró estudiar para adquirir cultura, durante un tiempo acarició el sueño de ser maestra, pero su escuela fue el partido. Enseguida comenzó a escribir panfletos, artículos en los boletines y periódicos de la cuenca minera. En esos primeros años, trabajó como bordadora, como sirvienta, se casó con un minero, conoció la pobreza, las luchas sociales y se convirtió en una militante. Para ella, como para tantos obreros, la revolución de octubre significó un acontecimiento decisivo en su militancia.

La confirmación de Dolores Ibárruri, que durante muchos años fue militante de base, ya en el recién formado partido comunista, llegó tras la dictadura, con el advenimiento de la II República. El 23 de agosto de 1930, el partido comenzó a tener un semanario llamado Mundo Obrero, que se transformó en diario a fines de ese año. La necesidad de disponer de un órgano de prensa, del que entonces carecía el partido, era apremiante, por lo que Mundo Obrero convirtió en el diario central del Partido Comunista de España.

Dolores se traslada a Madrid en 1931 para trabajar en la redacción de Mundo Obrero como compensación a su entrega y fidelidad, poco después accede al Comité Central, el partido la saca de la oscuridad. En la prensa comunista comienza a firmar algunos artículos como "La Pasionaria", empieza a ser conocida y demuestra también su capacidad como oradora en charlas y mítines ante los obreros.

Eusebio Cimorra, ex director de Mundo Obrero, escribió en su libro "Un mito llamado Pasionaria", que Dolores se abrió paso, junto a José Díaz, en el transcurso de la batalla contra la concepción sectaria y dogmática del grupo encabezado por Bullejos, que amenazaba con convertir el partido en una secta. Cuando José Díaz asciende a la Secretaría General del PCE, Dolores Ibárruri se consagra como dirigente del partido.

El nuevo equipo de la dirección comunista, encabezado por José Díaz y Dolores Ibárruri, con lo que luego será la política del Frente Popular, convertirá al Partido Comunista de España (PCE) en un partido de masas con cada vez más influencia política y social. En esos años comienza a forjarse la leyenda de "La Pasionaria" entre los trabajadores, con la revolución social de Asturias, de octubre de 1934, como fondo privilegiado. Los períodos de encarcelamiento de Dolores se sucedieron, y su imagen social cobró una fuerza inusitada cuando después de los acontecimientos de 1934 comenzó a encabezar duras manifestaciones.

En las elecciones generales del 16 de febrero de 1936, Dolores Ibárruri se presentó como diputada por Asturias. Su nominación no fue casual ni arbitraria, ya que durante años luchó junto con los mineros en sus batallas por la dignidad laboral y salarial y en favor de las libertades. El Frente Popular venció y Dolores salió elegida, junto con otros 16 camaradas, como diputada de la minoría comunista en la cortes republicanas. En Asturias fue ella quien encabezó, tras vencer la República, la liberación de los presos que estaban en la cárcel de Oviedo tras haber participado en la revolución de Octubre del 34.

El enorme activismo de esta mujer durante la Guerra Civil, y especialmente sus intervenciones como cabeza visible de las Mujeres Antifascistas, la convirtieron en un mito de la revolución. El prestigio de esta comunista encendió la imaginación de una multitud de poetas, como Rafael Alberti, Antonio Machado o Miguel Hernández.

Pero la guerra se perdió y Dolores tuvo que abandonar el país, partiendo al exilio en Francia y posteriormente en Moscú. Tras la muerte de José Díaz, Dolores Ibárruri es elegida Secretaria General del PCE, cargo que ocupa hasta 1960. En esa época, Dolores Ibárruri es ya, sin duda, una de las figuras más importantes del movimiento comunista internacional.

En el VI Congreso, Santiago Carrillo es elegido Secretario General del PCE, al tiempo que Dolores Ibárruri es promovida como Presidenta del partido.

Dolores a Madrid

Los más veteranos recuerdan aún el mitin que probablemente más gente haya congregado en un acto político, y ella fue la protagonista. En ese mitin miles de españoles se reunieron para homenajear al máximo símbolo del comunismo español, Dolores Ibárruri, y utilizaron al mismo tiempo este vals de aniversario dentro de la danza más amplia y aún entonces problemática de conquistar la legalidad. Manuel Vázquez Montalbán recuerda que el fervor de los aplausos y la emoción de los lagrimales se exteriorizaba con una emotividad colectiva treinta y ocho años contenida, una necesidad de reconocer a Dolores y al reconocerla darnos a nosotros mismos identidad, recuperar lo que durante tanto tiempo habíamos ocultado o proclamado en la soledad de las células y las comisarías.

El Partido Comunista en España, había protagonizado un largo e implacable combate contra la dictadura, no el único, pero sí el más constante y el más reprimido por el franquismo. Desde 1939 hasta la semana santa de 1977, transcurrieron treinta y ocho años de clandestinidad, durante los cuales el partido hizo cuanto pudo y supo por crear una esperanza de cambio democrático.

Tras la muerte del general Franco y el final de la dictadura militar, Dolores regresa después de 38 largos años de forzado exilio. El recibimiento es apoteósico, de las endebles escaleras del avión desciende una mujer, Dolores Ibárruri, que cuenta ya con 80 años, pero que aun conserva una energía excepcional. Dolores es un símbolo, es mucho más que un mito.

Es elegida de nuevo diputada por Asturias en las primeras elecciones democráticas, presidiendo la primera sesión de las cortes junto a Rafael Alberti, este hecho disgustó a muchos y nos alegró a todos nosotros o a nuestros padres. Las expectativas del PCE, sin embargo, se quedaron lejos de los veinte escaños que finalmente obtuvimos.

La Pasionaria nunca abandonó su actividad política, participando por ejemplo en la manifestación de solidaridad con las Madres de la Plaza de Mayo. Dolores, como comunista de profundas convicciones, fue una militante hasta el final de sus días. Nos dejó un 12 de noviembre de 1989 en Madrid, a los 94 años de edad. La enterramos en el recinto civil del Cementerio de La Almudena, junto a Pablo Iglesias.

El entierro de Dolores fue el primer acto político al que, conscientemente, asistí en mi vida. Allí, nuestro secretario general, otro grande, Julio Anguita, pronunció las siguientes palabras, dirigiéndose a Pasionaria en segunda persona:

"Dicen, Dolores, que has muerto. Qué tontería. Pervives en cada uno de los que te quieren y ¡son tantos! En cada imagen de la humana nobleza, en cada gesto de llaneza austera, en cada palabra de afirmación en la justicia, en cada voz de rotundidad sonora. Tu imagen, tus gestos, tu palabra, tu voz..."

"Tu has hecho desde tu partido algo extraordinario: trascenderlo, superarlo. Tu comunista ejemplar, eres de todos: de los que han levantado el puño y de los que se han santiguado".

"Acabas de explicarnos una lección política: se es más comunista en la medida en que se es más para el pueblo. El partido no se organiza para él, sino para los demás. Y este, tu partido, está sobrecogido y alborozado. Sobrecogido por la grandeza de tu lección que nos remueve hasta el fondo. Alborozado porque se siente confirmado en su apuesta".

"Ante ti, presidenta, recogemos tu último discurso. Con la pasión del corazón que tu, Pasionaria, pusiste en la causa de la emancipación humana. Con la serenidad ordenada del pensamiento y la reflexión. El PCE, tu PCE, se ratifica y apuesta por todo lo que ha dado sentido a tu vida de luchadora. Seremos la fuerza política comunista que estos momentos están demandando".

"Mujer, cuánto has hecho por tus compañeras. Mujer, qué ejemplo para mujeres y hombres. Mujer, qué roca llena de ternura. Mujer, qué fragancia de firmeza. Dolores, ha sido muy largo y muy duro tu combate. Entorna los ojos y sueña en tu pueblo".

"Duerme, compañera Ibárruri. Reposa, camarada Pasionaria. Descansa, presidenta. Sueña dulcemente, madre Dolores".

La Pasionaria, symbol für den kommunismus

Zwanzigsten Jahrestag des Todes von Dolores Ibárruri


Vor zwanzig Jahren starb Dolores Ibárruri, die "Pasionaria"
Ein Symbol für den Kommunismus in Spanien
David Arrabalí
Unsese Zeit


Dolores Ibárruri, geboren am 9. Dezember 1895 in Gallarta (Baskenland) und Tochter der aufkommenden Arbeiterbewegung, befand sich von Beginn an im Brennpunkt der wichtigsten gesellschaftlichen Regung jener Epoche, im Bergbau. Diese junge Frau sollte die "Mutter" aller Kommunistinnen und Kommunisten werden.

Dolores lernte, sie wollte Lehrerin werden; aber ihre Schule wurde die Partei. Sie begann Flugblätter zu schreiben, Artikel für Rundschreiben und Zeitungen der Minenarbeiter. Sie heiratete einen Bergmann, lernte die Armut kennen, die gesellschaftlichen Auseinandersetzungen, und wurde Kämpferin. Für sie, wie für alle Arbeiter, war die Oktoberrevolution ein entscheidendes Ereignis. Lange Jahre Basismitglied in der kurz zuvor gegründeten Kommunistischen Partei Spaniens (PCE), kam nach der Diktatur, mit der zweiten Republik, ihre Feuertaufe. Ab dem 23. August 1930 hatte die Partei eine Wochenzeitung, "Mundo Obrero" (Arbeiterwelt), die ab Ende 1930 Tageszeitung wurde; die Notwendigkeit endlich über ein Presseorgan zu verfügen war groß.

Dolores ging 1931 nach Madrid, um in der Redaktion von MO zu arbeiten, und kurz darauf wurde sie in das Zentralkomitee berufen. In der kommunistischen Presse zeichnet sie einige Artikel mit "La Pasionaria" ("Die Passionsblume", gewählt in Anspielung auf das Wort für Leidenschaft), wird langsam bekannter und zeichnet sich als Rednerin in Arbeiterversammlungen aus.

Eusebio Cimorra, ehemaliger Direktor von Mundo Obrero, schrieb in seinem Buch "Ein Mythos namens Pasionaria", dass Dolores sich gemeinsam mit José Díaz im Verlauf des Kampfs gegen die sektierisch-dogmatische Konzeption von José Bullejos ihren Weg bahnte. Als José Díaz 1932 zum Generalsekretär der PCE aufstieg, wurde auch Dolores Ibárruri zu einer führenden Genossin in der Partei.

Die neue Parteileitung um José Díaz und Dolores Ibárruri machte mit dem später Volksfrontpolitik genannten Vorgehen die PCE zu einer Massenpartei mit wachsendem politischen und gesellschaftlichen Einfluss. In jenen Jahren begann sich unter den Arbeitern die Legende der "Pasionaria" zu bilden; mehr noch mit der Revolution in Asturien im Oktober 1934. Dolores wurde immer häufiger eingesperrt und ihr Bild erhielt noch mehr Kraft, als sie nach den Ereignissen von 1934 heftige Demonstrationen anzuführen begann.

In den Wahlen vom 16. Februar 1936 war Dolores für Asturien Kandidatin für den Senat. Sie hatte jahrelang mit den Bergleuten Schlachten für würdige Arbeitsbedingungen und Löhne sowie für Freiheiten geschlagen. Die Volksfront siegte, und Dolores wurde mit weiteren sechzehn Genoss/inn/en für die kommunistische Minderheit gewählt. Nachdem die Republik gesiegt hatte, war sie es, die die Befreiung der Gefangenen anführte, die wegen der Revolution des Oktober 1934 im Gefängnis von Oviedo waren. Die enorme Aktivität dieser Frau während des Bürgerkriegs, besonders als sichtbarer Kopf der antifaschistischen Frauen, haben sie zu einem Mythos der Revolution gemacht. Das Prestige dieser Kommunistin entflammte die Vorstellungskraft vieler Dichter, wie Rafael Alberti, Antonio Machado oder Miguel Hernández.

Aber der Krieg ging verloren und Dolores musste das Land verlassen, ging ins Exil nach Frankreich und später nach Moskau. Nach dem Tod von José Díaz wurde Dolores Ibárruri 1942 zur Generalsekretärin der PCE gewählt. Diese Funktion hatte sie bis 1960. In dieser Zeit ist Dolores Ibárruri ohne Zweifel eine der bedeutendsten Figuren der internationalen kommunistischen Arbeiterbewegung geworden. Beim 6. Parteitag 1960 wurde Santiago Carrillo zum Generalsekretär gewählt und Dolores Ibárruri wurde Vorsitzende der Partei.

Die Kommunistische Partei Spaniens hatte einen langen Kampf gegen die Diktatur geführt, nicht den einzigen, aber den konstantesten und vom Franquismus am meisten kriminalisierten Kampf. Von 1939 bis Ostern 1977 waren achtunddreißig Jahre der Illegalität vergangen, während derer die Partei tat, was sie konnte, um eine Hoffnung auf demokratischen Wechsel zu sichern. Nach dem Tod von General Franco und dem Ende der Diktatur kehrte Dolores nach achtunddreißig Jahren Exil zurück. Es gab einen verklärten Empfang, aus dem Flugzeug stieg eine achtzigjährige Frau, die aber noch eine außerordentliche Stärke hatte. Dolores war ein Symbol, viel mehr als ein Mythos.

Sie wurde in den ersten demokratischen Wahlen wieder zur Abgeordneten von Asturien gewählt und saß dem Parlament gemeinsam mit Rafael Alberti vor, was vielen missfiel, aber zur Freude von uns und unseren Eltern. Die Erwartungen der PCE waren aber weit größer gewesen als die gewonnenen zwanzig Sitze.

Die Pasionaria hörte nie mit der politischen Tätigkeit auf. Sie war eine Kommunistin tiefster Überzeugung und blieb es bis zu ihren letzten Tagen. Sie verließ uns am 12. November 1989 in Madrid, mit 94 Jahren. Wir begruben sie auf dem zivilen Teil des Friedhofs La Almudena, neben Pablo Iglesias, dem 1925 gestorbenen Marxisten und Gründer der PSOE. Die Beerdigung von Dolores war der erste politische Akt, an dem ich in meinem Leben teilgenommen habe. Dort sagte ein anderer Großer, Julio Anguita:

"Dolores, man sagt, du seist gestorben. Was für ein Unsinn! Du lebst weiter in allen, die dich lieben, und das sind viele! Du hast etwas Außerordentliches gemacht: von deiner Partei ausgehend sie zu übertreffen. Dein kommunistisches Beispiel macht, dass du allen gehörst: denen, die die Faust erhoben haben, und denen, die sich bekreuzigt haben."

Sembranza de Dolores Ibárruri por Vázquez Montaban

XX Aniversario de la muerte de Dolores Ibárruri

Manuel Vázquez Montalbán, a las Memorias de Pasionaria
1939-1977, de Dolores Ibárruri, Planeta, Barcelona, 1984

Dolores Ibárruri, que ha aportado sentido de coexistencia y reconciliación crítica al movimiento obrero, a la expansión del comunismo hacia los cuatro puntos cardinales del mundo, es ante todo lenguaje. La Dolores de sus comienzos combativos era una mujer del pueblo que convertía la realidad de su condición obrera en conciencia de clase y estaba dotada para decirlo con palabras y acciones que fueran entendidas por el pueblo.

Así de simple y así de difícil. Dolores siempre ha estado dotada de algo que nos preocupa y fascina especialmente a los escritores y cineastas: la verosimilitud, palabra emparentada con veracidad. A Dolores te la crees por su simple estar y por eso es ante todo una creencia popular de los que presenciaron su arrojo en las luchas sociales de la preguerra, su papel de símbolo moral durante la guerra civil y su posterior gravitación sobre la dramática historia del Partido Comunista de España.

Incluso ahora, en tiempos de división y crisis, Dolores Ibárruri sigue siendo un punto de referencia que no se atreve a atacar ninguna de las partes de lo que fue aquel partido comunista capaz de plantarle cara a la dictadura y de contribuir a la reorganización de la conciencia democrática española, de contribuir a la reconstrucción de la razón. Todavía Dolores podría ser sustancia de amalgama para una cada vez más necesaria reunificación de los comunistas de España.

En ocasiones he empleado palabras como mito o símbolo aplicadas a la persona histórica de Dolores y he encontrado en las filas comunistas cierta resistencia a aceptarlas, porque les parece que son palabras que implican irrealidad. Y no es eso. El mito es una suprarrealidad que siempre se basa en una apoyatura real y el símbolo es una cúpula lingüística que alberga múltiples significados. Sería inexplicable Dolores sin comprender que viene de una clase social condenada a priori a la mudez.

El pueblo acepta a sus líderes naturales cuando tienen una visión de conjunto de lo que les pasa y de lo que hay que hacer para que la realidad se transforme, y éste es el caso de aquella hija de minero, esposa de minero, católica y carlista en sus orígenes y que de pronto un buen día descubrió que podía convertirse en la voz natural de esa clase muda y explotada. Le bastó sufrir la realidad para saber verla y poder explicarla en un ejercicio modélico de formación de una conciencia de clase.

Éste es el misterio original del nacimiento de Dolores como símbolo, al que hay que añadir la magia de su voz, una presencia de mujer del pueblo fuerte y alta para su tiempo y una gran capacidad de sentir como los demás, por encima del en ocasiones inevitable grado de cinismo político.

26 de octubre de 2009

Lenin era un fiestero de vanguardia

XX aniversario de Lenin Dadá, del francés Dominique Noguez
Lenin era un fiestero de vanguardia

Un ensayo asegura que al gran bolchevique le encantaba salir de marcha, tomar copas, y que era un fiestero de vanguardia. Además, habría creado el dadaísmo.

Un año antes de encabezar la Revolución Rusa y destronar al zar Nicolás II, Lenin creó el dadaísmo en un cabaret de Zurich, Suiza. La tesis de que el bolchevique fue uno de los artífices del surgimiento de uno de los movimientos artísticos más importantes del siglo XX, predecesor del surrealismo, aparece en el libro Lenin Dadá, del francés Dominique Noguez, recién traducido al español (Península).

El autor recopiló testimonios y frases para apoyar su tesis: la que sostiene que Tristan Tzara –el padre del dadaísmo– y Lenin fueron cómplices y trabajaron juntos en la fundación de la corriente que propuso el rechazo a toda tradición y la puesta en cuestión absoluta del arte, la poesía y la literatura, contraponiendo un clima libertario de fiesta constante y un elogio de lo absurdo.

En un libro curioso, Noguez incluso asegura conocer un dato en el que los historiadores de arte nunca coinciden: el del origen del término “dadaísmo”. Según el francés, el propio Lenin, que organizaba fiestas con el seudónimo de Señor Dolganeff, una noche de jolgorio y borrachera empezó a gritar “Da, da”, que significa “Sí, sí” en ruso, y ahí inspiró a Tzara para nombrar al naciente movimiento en el que el Lenin exiliado se transformó en artista vanguardista.

Conocido por sus novelas y ensayos provocadores, Noguez asegura que la primera etapa de su trabajo estuvo dedicada a probar que Lenin iba a los cabarets a emborracharse, algo que no le trajo “ningún problema” ya que sus andanzas eran conocidas. A eso se suma que Vladimir Illich Ulianov –tal el verdadero nombre del revolucionario– y su novia vivían en la cuadra del cabaret Voltaire, lugar en el que nació el dadaísmo y del que el ruso parece haber sido habitué. El escritor sostiene con documentación que existió la relación entre Lenin y Tzara –de hecho cita un texto en el que el rumano admite el intercambio– y dice que algunos de los poemas atribuidos al padre del dadaísmo estaban manuscritos por el líder bolchevique.

Sin embargo, Noguez asevera que no se cree la tesis de su propio libro y afirma: “He hecho como ciertos investigadores deshonestos, tontos o delirantes que llevan al límite una tesis que descansa sobre hechos, fechas y documentos auténticos y verificables”.

Salvador Dalí también había vinculado a Lenin con el dadaísmo en su cuadro “Alucinación parcial”, en el que aparecen seis cabezas del ruso sobre un piano.

El libro del francés fue editado por primera vez en 1989, el año en que cayó el Muro de Berlín, y rompió con la imagen de la vida austera que llevaba el bolchevique en su exilio, ya que ahí se muestra que participó de distintas fiestas con varios nombres y máscaras.

Noguez, que define a su texto como un “libro-farsa”, relata las andanzas de Lenin y prueba que éste –perseguido por espías rusos y suizos– fue habitual de las tabernas en cada ciudad europea que visitó. También cuenta que en París junto a un amigo cambiaban las etiquetas de las botellas de champagne para tomar las bebidas más caras por unas pocas monedas.

El libro recoge también los dichos de un pintor que define al líder bolchevique como “muy alegre, muy bueno y muy cochino en el amor”.

La polémica de Noguez genera posturas contrapuestas sobre Lenin. Por un lado, acerca de la veracidad de los contactos entre el autor de El Estado y la revolución y el dadaísmo. Por el otro, sobre si su participación en el movimiento de vanguardia y sus andanzas nocturnas respondían a gustos pequeñoburgueses o a una vocación revolucionaria y antisistémica.

23 de octubre de 2009

La alargada sombra de la corrupción

Crisis económica, corrupción y crispación política
La alargada sombra de la corrupción

David Arrabalí (Mundo Obrero)

Que la política española es una ciénaga en estos momentos es una obviedad. Este gobierno, muy debilitado, lleva meses capeando el temporal de la crisis como puede, da bandazos a izquierda y derecha para mantenerse, ataca y se defiende con los casos de corrupción que emergen con fuerza.

Por otro lado, el principal partido de la oposición ha apostado por una estrategia de confrontación, restaurándose en la política nacional una dinámica de descalificaciones que recuerda otros tiempos, y que necesariamente conduce a la crispación política y social.

Esta estrategia de crispación se está aplicando a los casos de corrupción política que se investigan en los tribunales y que afectan principalmente a políticos del PP, pero en muchos casos también al PSOE.

La corrupción se relaciona, en general, con el mal uso del poder político con el fin de conseguir un beneficio o ventaja ilegítima, generalmente secreta y privada. También, se identifica como corrupto todo comportamiento que, de convertirse en conocimiento público, conduciría a un escándalo.

Pero entonces, ¿a que se debe que políticos que han sido imputados o encancelados por casos de corrupción hayan obtenido mayorías absolutas o gocen, según las encuestas, de un extraordinario apoyo popular en su pueblo o comunidad?.

Sencillamente, se debe a que la corrupción no está considerada como lo que es, una lacra social, si no que, más bien, incluso está bien vista y considerada como algo normal. La cultura política del pelotazo en los últimos doce años de extraordinario crecimiento especulativo ha conllevado un ansia de enriquecimiento personal desenfrenado de la que las clases populares se han contagiado intensamente.

Todos conocemos historias de hombres sin escrúpulos pero con mucha ambición, a los que la sociedad corrupta en que vivimos ha encumbrado como grandes empresarios y hombres modelo del sistema. En este sentido, como símbolo del fenómeno de corrupción que nos ha asolado y nos asola aún, podemos poner a Francisco Hernando, más conocido como Paco El Pocero.

La pasión del dinero es una pasión fortísima, que arrastra a la gente desde siempre, pero que siempre aparece asociada al modelo de crecimiento capitalista. Los años del desarrollismo franquista son un claro ejemplo de como las estructuras de poder desarrollan una enorme corrupción en el proceso de expansión capitalista. También, durante la democracia, el felipismo fue una trama de poder que interconectó a los grupos económicos con las estructuras políticas institucionales y partidarias.

De una u otra forma, desde el gobierno o la oposición, esas estructuras y redes de influencia se siguen manteniendo; sin ellas nunca hubiera sido posible la decisiva influencia de determinados grupos de comunicación o la corrupción generalizada que ahora está emergiendo y de la que por el momento tan sólo se está viendo la punta de iceberg.

Manuel Monereo, ha señalado recientemente, en un artículo publicado en Rebelión, que el patrón o modelo de crecimiento español en estos doce últimos años ha sido posible y se ha mantenido por la complicidad de las fuerzas políticas mayoritarias, con los grupos de poder financiero-inmobiliarios.

Han sido el gobierno central, las Autonomías y las instituciones locales los que han hecho la vista gorda ante los desastres urbanísticos, han seguido desregulando y privatizando, a cambio de (ésta es su mejor cara) conseguir ingresos para sus menguadas arcas, financiación extra para las cada vez más costosas campañas electorales, cuando no corrupción directa de personas que se han enriquecido ante la pasividad, o el abierto apoyo, de una opinión pública que asocia como normal la corrupción y la política.

Tarde o temprano, según Monereo, esta enorme y sistemática corrupción, emergerá. Se tiene la sensación de que el conflicto entre las grandes formaciones políticas está relacionado con la ruptura de un pacto no escrito que consiste en tapar mutuamente las corrupciones y situarlas al margen del debate político. En el fondo, hay que insistir en el enorme poder político de la oligarquía financiero inmobiliaria y mediática para controlar la agenda del gobierno e imponer sus alternativas.

Hay que empezar a preguntarse si esta corrupción generalizada semioculta que sólo parcialmente nos facilitan los medios de comunicación no está inserta en el corazón de nuestra propia sociedad, si no se trata de un cáncer moral perfectamente arraigado entre nosotros. Un cáncer cuyo origen tal vez se halle en el mismo origen de la etapa democrática: no hubo ruptura, sino reforma, con ello se arrastraron todos los vicios y hábitos imperantes en el tardofranquismo.

En la situación actual, como hemos dicho al principio, caracterizada por la estrategia de la corrupción que está utilizando el PSOE y por una estrategia basada en la crispación empleada por los dirigentes del PP, cabría preguntarse el por qué de ambas estrategias, cual puede ser el resultado para los partidos mayoritarios y cómo esto puede influir en otras fuerzas políticas como Izquierda Unida.

Parece claro que las razones y motivaciones de ambos son electorales, el PSOE aspira a mantenerse en el poder en unas circunstancias muy adversas para alcanzar ese objetivo; mientras el PP espera ganar las elecciones y acceder al poder por el desgaste del partido del gobierno y mediante la crispación política con la que espera la movilización de todos sus votantes potenciales.

La primera consecuencia de estas estrategias ya la hemos apuntado, se ha abierto la caja de los truenos, rompiéndose un pacto no escrito de los dos partidos mayoritarios que consistía en taparse las corrupciones de ambos partidos y situarlas al margen del debate político.

Respecto a cual puede ser el resultado, la estrategia de la crispación consolida el voto fiel del PP pero parece que le impide ganar votos moderados. Y es en esa franja del electorado moderado que han votado alguna vez al PP donde pueden estar los votos que dan la victoria electoral. Por otro lado, esta estrategia de la crispación ya se practicó en la legislatura pasada y fracasó, pero entonces no se sentía la crisis económica. La estrategia de la corrupción que emplea el PSOE contra el PP es una estrategia defensiva, que, aunque parece puede dar resultado, quizá este no sea suficiente para parar la sangría de votos y poder conservar así el poder.

En cualquier caso, ganará la abstención, y también puede que con estas estrategias pierdan tanto el PSOE del gobierno, como el PP en la oposición. La incógnita es si Izquierda Unida, como una fuerza diferenciada (nos interesa) de la izquierda transformadora aprovechará esta coyuntura para recuperar la influencia política y social que ha perdido en los últimos años.

Esperemos vencer a la derecha sonriente. Lo único que puede salvar a IU y diferenciarla realmente, es la ética frente a la estética, los valores frente a la confrontación falsa, hueca y gratuita cuando no se tienen argumentos políticos reales que diferencie a PP y PSOE. En definitiva, la Política con mayúsculas, entendida como ética de lo colectivo. Cuando quieren, y parece muchas veces que han conseguido, desprestigiar la política, nosotros tenemos que seguir defendiéndola, y practicándola, como ese espacio de servicio público donde se construye, entre todos construimos, lo colectivo, lo que a todos nos incumbe y nos afecta.